Perros

Cuando debo llevar a mi perro al etólogo

¿Hasta dónde podemos resolver los problemas de conducta de nuestro perro? Es cierto que todos los perros en alguna etapa de su vida, sobre todo de cachorros, nos han dejado algún no muy grato recuerdo, como aquella ocasión en la que el perrito se comió la defensa de nuestro recién estrenado automóvil. Ciertas conductas no deseables pueden ser manejadas por los dueños con un poco de atención y dedicación a sus perros y siguiendo algunas recomendaciones por parte del veterinario.

Pero… ¿Qué pasa cuando estas conductas no paran, empeoran o se convierten en peligrosas? Este es el momento de consultar un especialista. Los especialistas en conducta animal se llaman etólogos. Por lo general son médicos veterinarios con una maestría, especialidad o doctorado en conducta animal y son los únicos que, basándose en conocimientos científicos, están capacitados para resolver cualquier tipo de problema de conducta que llegara a tener un perro. En algunos casos deberán prescribir medicamentos los cuales deben manejarse con cuidado y bajo estricta supervisión médica ya que algunos medicamentos son incompatibles con otros. En manos no calificadas, esto podría traer consecuencias verdaderamente trágicas.

Algunas de las conductas que definitivamente requieren de este tipo de ayuda son las siguientes:

  • Un perro que al ser dejado solo en casa destruye todo, ladra o llora sin parar y se orina y defeca por todos lados probablemente esté sufriendo de ansiedad de separación. Esto puede ocurrir a perros que han sido adoptados varias veces ya que no saben en qué momento los van a abandonar de nuevo. Este tipo de comportamiento requiere de ayuda profesional ya que es probable que requiera de medicación.
  • Los perros que presentan algún miedo patológico a ciertos ruidos o situaciones que por sí mismas no representan peligro. Ninguna fobia es normal, sin embargo, existen miedos que son comunes en los perros, como el miedo a los truenos o a los cuetes. Es normal que un perro jadee o tiemble, pero si realiza otro tipo de conductas como automutilarse o defecar, lo ideal es recurrir a un especialista.
  • Es absolutamente normal y deseable que un perro trate de proteger su territorio o a sus dueños. Lo que no es normal es que ataque a alguien a quien nosotros hemos consentido dejar pasar. Los perros deben obedecer cuándo dejar de gruñir o ladrar y no deben de atacar a nadie cuando les hemos hecho saber que todo está bien. Existen razas más agresivas que otras, por lo que desde cachorros se les debe enseñar que uno es el que manda. Si no se lleva a cabo un proceso de jerarquización adecuado (en el cual el perro deberá someterse ante sus dueños) este perro cuando tenga entre un año y medio y tres años de edad, empezará a tener serios problemas de agresividad.

Este tipo de problemas es el más difícil de resolver siendo que en la mayoría de los casos el perro acaba siendo agresivo con todos los integrantes de la familia. No trate de resolver usted solo la situación, podría empeorarla. Se trata de un tema delicado en el cual solamente un profesional puede ayudar.

Existen otros tipos de agresividad como la que presentan dos perros del mismo sexo. Es común entre perros de razas dominantes grandes y pesadas o en terriers. Si uno de los perros no se somete al otro, lo más probable es que acaben peleándose toda la vida. Este problema es muy complicado de resolver.

Otro tipo de agresividad es la que algunos presentan al jugar con sus dueños. Durante el juego el perro muerde, ataca o gruñe. Esta conducta se presenta por lo general en perros que no fueron socializados desde temprana edad o cuando los dueños han jugado rudo con ellos desde pequeños. Nunca, bajo ninguna circunstancia, juegue rudo con su perro. Los perros aprenden las conductas agresivas mediante el juego y podría terminar fácilmente en un ataque. Tampoco es deseable que el perro ataque al quererle quitar un juguete o al acercarse a su plato de comida. Un perro debe dejar que el dueño manipule sus pertenencias y su plato de comida, de otro modo, el perro está siendo dominante con el dueño y podría llegar a atacarlo.

Otros perros son agresivos hacia otros animales que consideran sus “presas.” El problema es que algunos perros con este tipo de inclinaciones (instinto) pueden confundir un niño pequeño o el perrito del vecino, fácilmente con una presa. Esta conducta es común en terriers y los perros que han sido mayormente implicados en este tipo de ataques han sido los Rottweilers y Bull terriers. Esta conducta puede evitarse si se sabe manejar apropiadamente al perro desde que es cachorro, siendo siempre firme y dominante con este tipo de razas.

Siempre consulte con el veterinario antes de adquirir una raza de perro. Consulte diferentes libros de razas de perros para que no tenga una sorpresa. Escoja una raza de perro que pueda manejar y no la que físicamente le agrade. Este es un error común y que en la mayoría de los casos termina en abandono del perro o frustración por parte del dueño.

Si su perro le está ocasionando problemas, antes de pensar en regalarlo o abandonarlo tome en cuenta que los perros…  ¡Sí tienen psiquiatras!

M.V.Z. Karin Vomend Álvarez