Gato

¿Debo bañar a mi gato? ¿Con qué frecuencia?

Los gatos en general son muy higiénicos; dedican gran parte del día a la limpieza de su pelaje por medio del acicalamiento utilizando su lengua. La lengua de los gatos tiene una textura áspera, y con ella, retiran toda la piel y el pelo muerto de su cuerpo. Aunque los gatos se acicalan ellos mismos, en ocasiones es necesario bañarlos, ya que es importante cuidar de su higiene y salud por el bien de ellos y por el de sus dueños, en especial si viven en el interior de una casa.

La piel de los gatos debe ser fuerte, resistente y sin caspa. Puedes acostumbrarlos a cepillarlos regularmente una o dos veces por semana desde que son pequeños, y a bañarlos, sólo cuando sea necesario, con agua tibia. No todos los gatos disfrutan del baño. Si los bañas desde su edad temprana, es decir, a partir de los 2 ó 3 meses de edad, cada 3 ó 4 meses, los baños no serán estresantes para ellos. Antes de esta edad, puedes usar toallas húmedas o espumas de lavado en seco que no los irriten. Normalmente, los gatitos requerirán baños más seguido ya que acumulan más suciedad, en especial si salen o viven en el exterior.

Los gatos con pelo mediano o largo necesitarán más atención que los de pelo corto. No es necesario bañarlos si su pelo está sano y si los cepillas regularmente, pero si notas que el pelaje de tu gato está sucio, decolorado, grasiento, enredado o huele mal, evita cortarlo y mejor opta por un baño. Asegúrate primero que esté vacunado y de cortarle sus uñas. Cepíllalo primero para estimular su dermis y para remover todo el pelo suelto que pudiera tener con el fin de que sea más sencillo bañarlo.

Bañar a los gatos en exceso puede afectar su piel resecándola, además de que podría desaparecer el aroma característico que sus cuerpos reciben con el acicalamiento. Se recomienda utilizar productos destinados para ellos que no alteren su piel y pH. Al enjabonar a tu gato, acarícialo al mismo tiempo. Procura retirar el champú por completo para no causar irritaciones y sécalo bien. No olvides colocar una toalla o alfombra dentro de la bañera para evitar que se resbale con sus uñas y para que no se asuste y estrese. Dale un juguete para que se distraiga. Evita el contacto del agua especialmente con su cara, orejas y ojos. Comienza por la parte inferior de su cuerpo utilizando tu mano o una esponja suave y asciende lentamente. Recuerda no regañarlo, ten paciencia y prémialo al terminar.

El baño de los gatos no es dañino si se hace de manera cuidadosa y con la frecuencia adecuada. Los beneficios de un buen baño serán que obtendrán un pelaje más brillante, hidratado y sano, sin embargo, no debemos abusar de éstos, ya que tienen en su piel y pelaje aceites naturales que lo protegen y mantienen su salud.

Examina a tu gato regularmente. Observa si tiene irritaciones en la piel, garrapatas o pulgas, especialmente si adoptaste un gato de la calle. Por otro lado, los gatos de edad avanzada, enfermos, con sobrepeso, o con alguna discapacidad, tendrán su pelaje más grasiento ya que muchos no pueden alcanzar todas las partes de su cuerpo al acicalarse. Si hace mucho calor, o se ensució con algún producto químico o tóxico o has notado que se ha dejado de asear, consulta a tu médico para que te guíe con el tratamiento adecuado a seguir.

Para tener una piel resistente, un pelaje sedoso y brillante es muy importante dar a tu gato un alimento balanceado de calidad Premium o Super Premium ya que contiene todos los nutrientes necesarios para lograrlo.

M.V.Z. Miguel Ángel López