Perros

Estos son los 3 problemas de conducta más comunes en los perros

Tirar de la correa, ladridos excesivos, agresividad, orinar y defecar en lugares inapropiados o hacer destrozos en el hogar, son algunas de las señales que indican irregularidades en la conducta de los perros. Si bien existen muchos problemas de comportamiento que pueden llegar a afectar a los canes, resulta fundamental conocer cuáles son las causas que originan estos problemas, para poder solucionarlos de la mejor manera posible.

En este apartado estaremos conociendo cuáles son los problemas de conducta más comunes que llegan a desarrollar los perros y a qué se deben. De manera que tengas una visión más amplia sobre el comportamiento de tu mascota y sepas cómo ayudarle a mejorar si notas que presenta alguna conducta inapropiada.

Causas que originan los problemas de comportamiento en los perros

Los problemas de conducta en los animales tienden a ser bastante frecuentes y se manifiestan por diversas razones. El aprendizaje o el trato que recibieron durante sus primeras etapas de vida suelen ser las causas más habituales por las que aparecen estos problemas; algunos dueños llegan a considerarse culpables cuando existen múltiples factores que desconocen y que piensan, pudieron haber influido.

Genética

La genética animal juega un papel importante a la hora de evaluar la conducta de un perro; pues en ocasiones puede afectar el aprendizaje del mismo. Por ejemplo, si una perra que tiende a ser asustadiza o nerviosa llega a tener cachorros, puede que estos desarrollen un comportamiento similar al de su madre, sobre todo si sufrió de estrés durante el embarazo. Otro caso asociado a este tipo de conducta es el de los perros que han sido víctimas del maltrato y castigo, como el pastor alemán, una raza que por lo general tiende a ser miedosa.

Socialización del cachorro

Este factor también se considera representativo e importante al evaluar los problemas de comportamiento de un can. La socialización del cachorro trata de un proceso que comienza cerca de la tercera semana de vida del animal y que termina cuando el perro cumple tres meses. En este período el cachorro aprende todo lo necesario para poder aplicarlo durante su etapa adulta, con esto nos referimos a los hábitos propios del perro como su lenguaje, la tolerancia, el desapego, entre otros aspectos. 

El hecho de separar a un cachorro de su madre y hermanos antes del tiempo adecuado puede llegar a provocar diferentes problemas de conducta en el animal, pues una vez que el período de socialización se cierra, comienzan a aparecer los miedos y fobias, debido a la susceptibilidad del can. Para evitar que esto suceda, debes darle prioridad a la socialización de tu cachorro. Recuerda que lo que para nosotros puede parecer una acción más, para ellos puede ser una mala experiencia que genere un trauma que justifique el motivo por el cual reacciona mal ante ciertos estímulos.

Principales problemas de comportamiento en los perros

A continuación, te mostraremos los problemas de conducta que suelen desarrollarse con mayor frecuencia en los perros. De esta forma te será más fácil evaluar el comportamiento de tu mascota y en caso de identificar alguna irregularidad, saber cómo solucionarlo.

1. No acudir al llamado

Muchos perros cuando salen a pasear, ya sea en el parque, campo o algún lugar abierto, quieren pasar todo el rato jugando o corriendo con otros animales. Sin embargo, cuando son llamados por sus dueños estos no atienden y simplemente siguen divirtiéndose; lo cual puede ser una señal de conducta inapropiada y puede deberse a muchos factores. Si es la primera vez que salen es muy probable que el canino no conozca la señal y por ende no sepa qué respuesta debe dar; y si su amo en lugar de enseñarle de manera adecuada, decide regañarlo por no hacer caso, puede que el perro asocie la llamada como un castigo y no quiera obedecer.

Así que, para lograr una respuesta efectiva, primero es necesario enseñarle la orden en casa. Una buena forma de indicarle la lección es a través de un premio; en este caso puedes mostrarle la recompensa, darle la orden y cuando acuda, otorgarle el premio. Una vez que el perro asocie la palabra con la acción, puedes repetirla en ambientes con pocos estímulos, primero con una correa larga y luego sin ella. De esta manera el perro se familiarizará con el llamado y estará listo para ponerlo en práctica en cualquier situación.

2. Destructividad y mordida excesiva

Esta conducta suele darse en los cachorros y es bastante comprensible y normal, ya que están experimentando nuevas actividades y puede que morder todo les parezca un juego, pues un perro no es capaz de distinguir con qué objetos debe jugar o con cuáles no, si nunca se les ha inculcado esto. Por lo que primero es necesario enseñarles de manera correcta, lo que está bien y lo que no, ya que si se les regaña cuando están mordiendo algo que no saben que no deben morder, estos pueden asimilar que es mejor destrozar las cosas cuando no están delante del dueño, lo cual terminaría empeorando las cosas.  

Para evitar que esto ocurra, deberás asegurarte de que las necesidades de tu mascota estén cubiertas, es decir, debes darle juguetes con los que pueda distraerse, motivarlo a hacer ejercicio, darle cariño y atención y hablarle con un buen tono de voz. Un perro que goza de un estilo de vida saludable y positivo, no debería tener conductas destructivas.

La ansiedad por separación también puede ser otro motivo relacionado a este problema, y se debe al apego incorrecto con el dueño. La solución ante este síndrome está en acudir a un especialista, puesto que requiere de un tratamiento específico que implica con frecuencia el uso de fármacos. Durante este proceso se debe educar al animal para que no asocie la destrucción con quedarse sólo en casa.

De igual forma, las fobias a tormentas o fuegos artificiales, también pueden provocar este tipo de comportamiento. Debido a que las mascotas en un intento por huir o esconderse tienden a reaccionar arañando o mordiendo puertas. El tratamiento en estos casos va a depender de la intensidad del miedo y puede implicar tanto medicación para aliviar el sufrimiento como la creación de un lugar en el que el can se sienta a salvo. 

3. Tirar de la correa

El correcto uso de la correa en los perros es muy importante, pues la mascota no debe llevar el mando, sino más bien caminar en armonía con su dueño. De hecho, algunos expertos asocian el uso de la correa con un cinturón de seguridad y no con un volante de conducir, ya que sólo se debe tirar de ella cuando el animal se sale de control.

Las causas más comunes por las que el perro tiende a tirar de la correa durante los paseos con sus amos es el exceso de adrenalina por llegar al lugar, la agresividad hacia otros perros o el miedo por salir a la calle. Esto último puede deberse a una incorrecta socialización o temor a situaciones nuevas.

Si nunca le has enseñado a tu mascota a caminar con correa puedes apoyarte en las técnicas de recompensa, una buena estrategia es hacer que el perro se coloque en un costado con un movimiento y darle el premio una vez que lo haya hecho. Con esto el can entenderá que debe avanzar a tu ritmo y no detenerse o ir más de prisa.