Gato

¿Mi gato puede comer lácteos?

Hay un alimento que siempre está asociado con los gatos, y es la leche, así como la gran variedad de productos lácteos que se derivan de este producto nutricional, pero, alguna vez, especialmente antes de servirle un plato de leche a tu minino, alguna vez te has preguntado ¿si es buena idea hacerlo?, ¿un gato puede beber leche y comer productos lácteos?

¿Mi gato puede comer lácteos?

La respuesta es no.

Aunque el gato acepte la leche de forma fácil, y hasta la pida por costumbre o porque la estás consumiendo tú, debes saber que la leche, el queso, el yogurt y hasta los helados son muy malos para los felinos.

La principal razón por la cual la leche de vaca (y cualquier lácteo) es mala para los felinos, es porque sus estómagos no están hechos para procesar una enzima específica de esta leche, hablamos de la lactosa, y al igual que los intolerantes a la lactosa, el sistema digestivo felino no puede consumirlos, y si llegará a hacerlo, su consumo podría provocar muchos problemas de salud al gato, principalmente problemas gastrointestinales entre ellos vómito, diarreas, gases y muchos más.

Además, hay que mencionar que a veces los lácteos pueden producir efectos alérgicos desde urticarias hasta asfixias, y esto sucede por las intolerancias e incluso se pueden desarrollar alergias.

En general es mejor evitar que los gatos coman cualquier producto lácteo, no solo la leche, también el queso y demás productos que contengan lactosa.

Así que, la próxima vez que tu gato esté maullando por leche, lo mejor es usar un producto sustituto y que no afecte su salud.