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Porque me gusta oler a mi perro

Parece una costumbre muy extraña, eso de oler a un perro; sin embargo, te sorprenderá saber que son muchas las personas que tienen perros en casa, quienes, no solo acostumbran oler a sus perros, sino que les gusta hacerlo. Pero, ¿por qué?, porque me gusta oler a mi perro.

Este hábito de oler a un perro puede parecer extraño visto desde afuera, e incluso podría parecer algo antihigiénico, aunque, ciertamente es algo bastante común y cuando el canino está limpio o es constantemente sanitizado, no hay peligro en olerlo para sentirte tranquilo, calmado y relajado al disfrutar de su dulce aroma.

Si estás buscando pistas o razones del porque te gusta oler a tu perro, la razón es simple y oler a un perro, a tu perro, suele tener un efecto reconfortante que te hace sentir bien.

Porque me gusta oler a mi perro

Puede parecer tonto, no obstante, el sentimiento de confort que sucede cuando una persona huele a su mascota, es claro. Eso sí, aún no existen estudios o evidencia científica que respalde esta premisa, y casi todo lo que podemos encontrar al respecto de porque olemos a nuestras mascotas es información anecdótica, pero, hay un hecho cierto, son muchas las personas que sienten enorme bienestar, placer y confort emocional cuando están con sus mascotas, especialmente cuando tienen una cercanía de esta naturaleza.

Este tipo de comportamientos humanos, en el cual una persona huele a su perro, suele creerse que tiene que ver no solo con el aroma, la costumbre y la familiaridad, ya que se considera que al oler a nuestro perro nos permite oler sus feromonas que nos calman y así es como nos acostumbramos a hacerlo.

Y sentirnos relajados no es el único beneficio de olerlos, ya que al estar tan cerca de una mascota para olerla podemos notar algo que este mal, un olor extraño que puede ser simplemente que está sucio y nos haga bañarlo para disfrutar nuevamente de su aroma, pero, tambien al olerlo podemos notar algo que este mal y pueda ser un síntoma de una enfermedad, y al olerlo se puede descubrir a tiempo.

Así que oler a nuestros perros en sus orejas, su cabeza o cuerpo no es malo, raro o extraño, es algo bastante común que nos ayuda a relajarnos y nos hace cómplices de ellos de mil maneras. Entonces, vayamos a oler a nuestros perros.