Perros

Qué pasa si no baño a mi perro

¿Alguna vez por alguna razón te has dejado de bañar por un día? ¿Por dos? ¿Por una semana? Y no quiero pensar cómo te sentirías si no te bañaras por meses y hasta por años. Mucha gente jamás baña a sus perros o lo hace tan poco que para el caso es lo mismo. ¿Acaso no has visto lo contento que se pone tu perro después de bañarse?

La limpieza del pelo de tu perro lo previene de enfermedades de la piel porque la mugre llena de bacterias podría aprovecharse de cualquier herida para infectar a tu perro. Es por esta razón por la que debes bañarlo cada vez que lo requiera. Pregúntale a tu veterinario cada cuándo lo debes hacer porque depende mucho de la actividad que tu perro desarrolle y en el lugar en donde vive. No es lo mismo un perro que vive en un departamento, que nunca sale y que tiene el pelo corto que un perro de pelo largo que vive en un jardín en un lugar de clima caluroso. Algunos perros requieren también de un corte profesional de pelo cada determinado tiempo y lo debes de llevar a que un profesional se lo realice.

Además del baño, debes de cepillar a tu perro por lo menos dos veces por semana para estimular su circulación y favorecer la caída del pelo muerto, lo que previene la formación de nudos en caso de perros de pelo largo. Existen cardas (cepillos) especiales para cada tipo y largo de pelo.

Ahora que si piensas que bañar a tu perro significa tenerte que poner un traje para buceo y acabar tan resbaloso como una barra de jabón es porque a la mejor no te han dicho la manera indicada de hacerlo.

Antes que nada, debes cepillarlo para evitar lavar el pelo que está muerto y trabajar el doble. Ya que terminaste de cepillarlo empieza a mojarlo del cuello hacia la cola con agua tibia. Si empiezas mojándole la cabeza se sacudirá todo el tiempo y acabarás igual de mojado que él. Utiliza primero un jabón neutro o un jabón antipulgas si lo necesita y enjabónalo bien sin olvidar las cuatro patas. Para enjuagarlo hazlo igual, del cuello hacia la cola. Repite esta operación si estaba muy sucio. Utiliza ahora un shampoo para perro y enjuágalo muy bien. Existen productos desenredantes para el pelo de los perros o bien puedes utilizar enjuague rebajado y darle una pasada si tiene el pelo largo. Ahora sí lo debes enjuagar muy bien. Es muy importante que no le dejes jabón y una manera de cerciorarte es tallándolo con tus manos y comprobar que no salga espuma.

Ahora trata de exprimirlo presionándolo con tus manos por todo su cuerpo para que cuando le mojes la cabeza y se sacuda no te salpique tanta agua. La cabeza la debes mojar toda y enjabonarla bien, trata de que no le escurra agua dentro de los oídos. Puedes, antes de bañarlo, limpiarle las orejas por dentro con una toallita de bebé, esto evitará que al escurrirle agua hacia dentro ésta no arrastre suciedad y se le infecten los oídos. El procedimiento para lavarle la cabeza es el mismo, de una a dos enjabonadas, shampoo y enjuague si lo necesita.

Ahora ya lo puedes secar. Necesitarás varias toallas bien secas para dejarlo lo más seco que se pueda. Nunca sueltes a tu perro mojado porque se irá a revolcar y podría acabar peor de sucio de como empezó. Tampoco lo dejes amarrado al rayo del sol, podrías olvidarte de haberlo dejado ahí y las consecuencias pueden ser fatales. Puedes utilizar también una pistola de pelo, pero sin calor porque le podrías quemar la piel. Es importante secarle muy bien las orejas por dentro con una toalla, sobretodo si tu perro es de oreja caída.

Aprovecha este tiempo para platicar con tu perro. Haz de éste, un momento agradable para tu mejor amigo.

Por M.V.Z. Karin Vomend