Alimentación

Sigue estos consejos para evitar que tu perro se deshidrate

El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) ha declarado que, a pesar del comienzo de la temporada de lluvias, el ambiente aún prevalecerá caluroso en varios estados de la República Mexicana. Por este motivo, no deben dejarse de lado las precauciones para evitar la deshidratación de todos los integrantes de la familia, lo que incluye también a los perros, quienes, al igual que los humanos, su cuerpo está compuestos por un alto porcentaje de agua, un factor que los vuelve propensos a la deshidratación cuando no reciben los cuidados adecuados.

Los perros necesitan tener una ingesta regular de agua al igual que nosotros, pero, debido a que no es posible acceder a este líquido por sí mismos, es necesario que los ayudemos a satisfacer esta necesidad para mantener su hidratación en condiciones óptimas.

  1. Mantener agua disponible en todo momento. El agua debe estar disponible dondequiera que vayan. Es decir, siempre debe haber un recipiente con agua fresca dentro del hogar y también debes llevar uno con ustedes cuando salgan a pasear. Si bien los animales se comunican con nosotros de ciertas maneras, es difícil saber cuándo tienen sed; por ello, debemos anticiparnos a su necesidad y brindarles la oportunidad de beber agua cuando les apetezca.
  2. Cambiar el agua a diario. Si el agua permanece en un recipiente durante días, es posible que ya no sea atractiva para ellos. La frescura es importante para no tener problemas bacterianos. Los tazones de agua deben cambiarse diariamente para asegurarse de que esté lo suficientemente fresca para atraer a un perro sediento.
  3. Hidratarlos con la cantidad correcta de agua. Al igual que las personas, no existe una cantidad establecida de ingesta de agua al día para todos los perros; sin embargo, los expertos calculan que un perro que únicamente se alimente de alimentos secos beberá de 30 a 50 ml de agua diariamente por cada kilo de peso. Es decir, un perro de 10 kg beberá entre 300 y 500 ml de agua al día, aunque esta cantidad puede variar en función de diversos factores; por ejemplo, el consumo será mayor si vive en un entorno cálido respecto a uno frío.
  4. Cuidar la calidad del agua que beben. Al igual que nosotros, la calidad del agua que ingieren los animales es esencial para el cuidado de su salud. De modo que, si quieres reducir las infecciones al mínimo, es necesario que el agua que le brindas a tu compañero esté purificada, de lo contrario estarán ingiriendo parásitos que pueden ocasionar malestares que acentúan la deshidratación, como la diarrea y el vómito. Una forma de disponer en todo momento de agua potable en el hogar es instalando sistemas de purificación. Un ejemplo de ello son las soluciones de purificación de Grupo Rotoplas, con las cuales es posible proveer a los integrantes de tu familia de agua purificada y cristalina.
  5. Tener siempre a su disposición un lugar con sombra. Sobrecalentarse puede ser un problema real para los animales. De modo que una de las mejores maneras de protegerlos es asegurándonos de que tengan acceso a un lugar con sombra para refrescarse cuando sea necesario. Esto es primordial los animales que se quedan afuera del hogar, pero también siempre que salen a pasear. No olvides que necesitan un lugar fresco para descansar y reponer sus energías.
  6. Limitar los paseos durante los horarios más calurosos. Así como los niños son propensos a concentrarse en la diversión sin considerar el calor, los perros pueden hacer lo mismo. De modo que, cuando las temperaturas están muy elevadas, tenemos que limitar los juegos y buscar horarios más adecuados. Para ello, considera que los expertos coinciden en que desde las 11 de la mañana hasta las 5 de la tarde los perros no deberían salir a pasear, pues en este periodo los rayos del sol son más fuertes.
  7. Incluir alimentos hidratantes en la dieta. Además de añadir agua o caldo a la comida seca, también podemos alimentar a nuestros animales de compañía con comida húmeda. El alimento convencional deberá mantenerse en una proporción mayor que el húmedo, ya que mientras que el sólido le brinda lo esencial para su nutrición, el húmedo le aportará los beneficios de la hidratación. También podemos hacer cubitos de hielo con sabor y otras golosinas caseras para perros, de esta manera podrán hidratarse a través de múltiples fuentes. Sin embargo, no olvides consultar con un veterinario cuáles son las mejores alternativas para diversificar su hidratación sin poner en riesgo su salud.

Sumar animales de compañía a nuestras familias viene una gran responsabilidad y no termina con los paseos y la alimentación. Su salud es también nuestra responsabilidad y, así como los humanos, eso incluye mantener una hidratación adecuada y cuidar la calidad del agua que se ingiere.