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Nunca corras cerca de un perro

La lección que siempre les digo a mis hijos, sin importar que ya estén grandes, es que no deben correr cerca de un perro, sobre todo los perros que no conocen.

Pero, ¿por qué?

Esto de correr, se está haciendo un deporte muy practicado en las ciudades, así que es muy común ver a personas que salen a correr a parques y comienza a trotar, pero, hay que ser conscientes, de que los perros, por instinto de cacería, tienden a perseguir todo aquello que corre.

Bien, no quiero decir que todos los perros lo hagan, pero, hay perros que no fueron socializados correctamente, que están bajo estrés o se sienten amenazados cuando ven a una persona correr, esto hace que el perro, pueda reaccionar de una manera incorrecta y comience una persecución que puede terminar en un ataque.

De hecho, este peligro es más fuerte con los niños, que cuando ven a un perro desconocido, por instinto, suelen correr para alejarse del perro, pero esto, lo único que hace, es propiciar una persecución.

Por ello, hay que respetar a los animales, y entender que los perros, por instinto, suelen perseguir algo o alguien que esté en movimiento.

Esta es la razón por la cual, si algún perro nos provoca desconfianza o miedo, no se debe correr, sino caminar de forma lenta y tranquila; y si vas corriendo, lo mejor que puedes hacer es aminorar la velocidad hasta pararte poco a poco y evitar que el perro, por miedo o por sentirse en peligro, llegue a atacar.

Cuando veas a un perro, no corras, solo ten una actitud tranquila, calmada, sin movimientos bruscos que no hagan que el animal se ponga alerta y lo haga considerarte un peligro, no hagas contacto visual, pero no pierdas de vista al perro, para alejarte y seguir con tu día, como si nada.