Cómo hacer la limpieza de orejas de mi perro
La limpieza de tu mascota es el primer paso para que tenga una buena salud, esta limpieza no se limita únicamente a los baños regulares, también implica la limpieza de sus ojos, hocico, genitales y también las orejas.
Aunque no lo creas, una de las zonas en la cual debes tener más cuidado en su higiene es con las orejas, que puede acumular mugre, cerilla e incluso hasta parásitos que pueden dañar su salud, equilibrio y sistema auditivo de forma drástica; por eso es muy importante revisar de forma muy regular sus orejas, para diariamente asegurarte que están limpias, tengan un aspecto correcto y no presenten ningún olor.
Si detectas algún aroma desagradable, líquidos extraños o mucha acumulación de cerilla diaria lo mejor es llevar a tu mascota al veterinario para que realice una inspección y descarte infecciones o enfermedades de seriedad.
Pero, si mantienes una correcta higiene en esta área, deberías evitar esos problemas.
Cómo limpiar las orejas de mi perro
El primer paso es limpiarte las manos, recuerda, esta es un área sensible que debes cuidar, proteger y tener mucha higiene con ella.
El siguiente paso es hacer una revisión ocular de la oreja, es decir, checar si solo es cerilla y en qué zonas se encuentra. Ten cuidado si tu perro es un perro pequeño.
Para limpiar la suciedad de esta zona, hazlo con una gasa limpia, la puedes remojar en agua de manzanilla o puedes usar una toalla hipo alergénica y sin olor para bebe para hacer esta limpieza.
Con el dedo y la gasa, saca la suciedad, grasa o cerilla hasta que quede limpia.
Si tiene mucha suciedad, usa una nueva gasa o toallita de limpieza.
Nunca uses una gasa para los dos oídos, ya que puede estar infectado un oído y puedes pasar la infección al otro. Siempre usa una gasa limpia.
Nunca limpies sus oídos con hisopos, puedes lastimar su sistema auditivo, sobre todo porque el perro no permitirá que metas cosas extrañas a sus orejas. Tampoco lo hagas con algodón, aunque parezca buena idea puede atorarse creando un mayor problema.
La forma correcta de limpiar sus oídos es con una gasa con el dedo tendiendo extremo cuidado.