Perros

Problemas del corazón de mi perro

Si tu perro muestra alguno de estos signos, llévalo al veterinario

Las enfermedades del corazón en perros son más comunes de lo que se cree. Se calcula que aproximadamente el 10% de los lomitos que acuden a consulta veterinaria, tienen alguna cardiopatía[1] y de todas ellas, el 95% las adquieren[2] a lo largo de su vida.

En el marco del Día Mundial del Veterinario, médicos de todo el país se reunieron en la ciudad de Guadalajara en la cuarta edición de Vet Days, evento organizado por Boehringer Ingelheim Salud Animal, para compartir actualizaciones en medicina canina y felina, haciendo especial énfasis en la importancia de un diagnóstico y tratamiento oportuno.

En conferencia de prensa, el MVZ. Esp. Rodrigo Ruiz Santillana, explicó que, por su falta de signos visibles, estos padecimientos son una amenaza para su calidad de vida ya que muchas veces no se diagnostican a tiempo.

El experto recalcó que cuando se notan signos y “hay un problema en el corazón, también puede haber repercusiones en otros órganos por lo que no se debe de perder de vista que el manejo de los pacientes debe de ser integral”. A continuación, te contamos lo que tienes que considerar para cuidar a tu mejor amigo.

Enfermedades y signos comunes

Al igual que con los humanos, el corazón de los perros es el encargado de bombear sangre hacia los órganos. La enfermedad más común en ellos es la enfermedad de la válvula mitral (EVM).

De acuerdo con la MVZ. Emilia Tobías, Gerente Técnico del segmento de Animales de Compañía de Boehringer Ingelheim Animal Health, “la enfermedad de la válvula mitral es más común en razas pequeñas y medianas de alrededor de cuatro o cinco años de edad y tiene fases en donde parecerá sano”.

Otros problemas cardíacos comunes en los perros incluyen soplos cardíacos, cardiomiopatía dilatada e insuficiencia cardíaca congestiva. Cuando se trata del corazón, los signos que manifiestan son similares cuando tienen alguna enfermedad, por lo que hay que prestar atención a los siguientes que pueden ser indicadores de algún padecimiento:

  • Tos
  • Letargo/cansancio
  • Dificultad para respirar
  • Dificultad para ejercitarse
  • Comportamiento anormal
  • y hasta desmayos

El MVZ. recuerda que, ante alguna de estas manifestaciones, lo importante es llevarlo al veterinario porque “a veces se confunden y se les administra un tratamiento para el corazón, pero en muchas ocasiones un paciente puede presentar alguno de estos signos y puede tratarse de otro órgano”.

Diagnóstico y tratamiento

Emilia Tobías explica que nunca deben pasarse por alto los signos que muestran nuestras mascotas y tan pronto se note algún cambio, es importante llevarlas al veterinario para que les haga una revisión. Por medio de exámenes físicos, radiografías, ultrasonidos, entre otras pruebas, el veterinario evaluará la estructura y el funcionamiento del corazón.

El tratamiento para los problemas cardíacos en perros depende de la condición específica diagnosticada. Actualmente hay medicamentos que pueden ser recetados por el veterinario y si se administran antes del inicio de los signos clínicos de la enfermedad, pueden ayudar a mejorar la calidad de vida y prolongar la supervivencia.

Prevención

Diferentes factores pueden influir para que su corazón deje de funcionar con normalidad, por lo que tomar ciertas medidas puede ayudar a reducir el riesgo de que desarrolle alguna enfermedad. Entre ellas, mantenerlo en un peso saludable es fundamental, ya que la obesidad ejerce una presión añadida sobre el corazón.

Además, la experta recomienda ejercicio regular, una dieta equilibrada para mantenerlo saludable y revisiones periódicas con el veterinario para detectar anomalías y proporcionar el tratamiento a tiempo.

Vivir con un perro con problemas cardíacos puede ser un reto, pero con un diagnóstico y tratamiento adecuados, es posible ayudar a que tu lomito tenga una mejor calidad de vida.

[1] Atkins C., et al. (2006) Guidelines for the diagnosis and treatment of canine chronic valvular heart disease. J Vet Intern Med.;23(6):1142–1150.

[2] Detweiler, D. K., et al. (1965). The prevalence and types of cardiovascular disease in dogs. Annals of the New York Academy of Sciences, 127(1):481-516.