Porque a mi perro le gusta jalar cosas cuando juega
Los perros son animales muy juguetones por lo que siempre andan jugando, corriendo, saltando; definitivamente esa es una de las características que más destacan de los caninos, su manía por jugar y divertirse todo el tiempo con todo tipo de actividades. Sin embargo, hay una actividad que los perros prefieren, y no es jugar con la pelota, nooo, su actividad favorita es jalar.
A los perros les gusta jalar sus cuerdas, jalar sus juguetes, es más, jalan entre ellos y hasta con sus dueños todo tipo de objetos que lleguen a su hocico, pero, ¿por qué?
Porque a mi perro le gusta jalar cosas cuando juega
Este tipo de conductas en los caninos, se cree, tienen que ver con sus instintos y su pasado más salvaje y natural, cuando ellos tenían que cazar a sus presas y las tenían que jalar para sacarlas de sus escondites o jalarlas para poder matarlas y así comerlas; pues bueno, resulta que en esos tiempos en los que tenían que jalar para poder sobrevivir, en esa época también solían cargar todo con su hocico y a la hora de la comida, cuando traían a su presa en este, podía suceder que otro perro miembro de la manada le jalara su almuerzo dando paso al famoso ritual de jalar entre ellos.
Si bien, en la actualidad este tipo de comportamiento es más que nada un juego, cuando se originó era una necesidad y hasta un símbolo de dominación para indicarle a los demás perros su fuerza e incluso su rango en la manada.
Ahora, en la actualidad, nada tiene que ver el juego de jalarse con mostrar dominio o territorialidad, ya que, con el paso del tiempo este comportamiento fue cambiando para convertirse en una manera efectiva para que, mediante este juego, el perro pueda generar vínculos y confianza, no solo entre otros perros, también con los humanos.
Además, para el perro, la acción de jalar como juego es un buen ejercicio que le ayuda a gastar muchas de sus energías en una actividad que involucra todo su cuerpo desde los músculos de las patas hasta agarrarse fuerte con los dientes del hocico; esto hace que sea un gran reto para el perro, uno que involucra sus costumbres del pasado, los vínculos actuales con sus seres queridos y por sobre todo esta es una actividad muy divertida que le puede ayudar a sacar toda su energía reprimida.