Perros

Torsión de estómago en los perros

La terrible torsión de estómago en los perros, es la enfermedad que nunca jamás en la vida quieres que le pase a tu perro, porque es una terrible sentencia de muerte y no hay nada que se pueda hacer para evitarlo, mientras ves como lentamente muere tu perro.

Por eso creo que debería haber más difusión sobre esta enfermedad que es prevenible y con acciones correctas puedes evitar que la torsión de estómago afecte a tu amada mascota; pero para ello debes conocer este horrible padecimiento para que así tengas las acciones preventivas correctas en cada momento.

¿Qué es la torsión de estómago?

Es cuando el estómago del perro se tuerce sobre sí mismo, y sucede porque los dos ligamentos que lo sujetan no son lo suficientemente fuertes para mantener el estómago en su lugar y el estómago se puede torcer debido por un salto, un cambio de postura, por tomar mucha agua o comer y luego tener una intensa actividad de ejercicio.

Cuando el estómago se tuerce sobre sí mismo evita que el perro pueda descargar el contenido del estómago, esto sucede porque se encuentra retorcido, eso hace que la presión aumente, el estómago interrumpe la circulación sanguínea, daña a otros órganos y el perro muere.

¿Cuáles son los síntomas?

El primer indicativo es que su pancita se pone muy dura, se hincha y se tensa, si lo tocas, suena como un tambor. Otros síntomas son que intenta vomitar, pero no puede y lo único que expulsa es espuma, también tiene espasmos abdominales y no se muestra molesto y se queja.

Cuando veas estos síntomas, tienes que correr a urgencias para estabilizar al animal lo más pronto posible.

¿Qué se puede hacer?

Una vez en urgencias, la única opción es una operación para unir el estómago al colon, para que el perro pueda evacuar.

Lamentablemente, con la torsión de estómago, es muy probable que esto vuelva a ocurrir.

¿Cómo evitarla?

Lo primero es cuidar su comida, y en vez de que coma mucho de una sola vez, lo mejor es dividir su alimento en varias partes; de esta manera el estómago nunca se sobrecarga.

Lo mismo sucede con el agua, por más sediento que lo veas, no permitas que tome mucha agua, ni muy rápido.

Después de comer o beber, cuida a tu perro, que no haga movimientos bruscos ni corra.

Evita el ejercicio muy agresivo o que sea muy fuerte.

Si ves a tu perro estresado o excitado, no le des de comer.

Las razas de perros que sufren con más frecuencia la torsión de estómago son: el Pastor Aleman, el Mastín Español, el Rottweiler, el Weimaraner, el Bóxer, el Bullmastiff.