Porque mi perro se vuelve loco después de bañarse
Bañar a un perro no es nada simple, fácil ni sencillo, y desde que es el momento de llevarlo a la regadera o al lugar en el cual al que bañarlo, el perro se pone muy difícil, bueno, por lo menos así sucede siempre con mis perros, y es literal un show de pago por evento, bañar a esos perros que odian el baño, pero disfrutan estar limpios.
En verdad, bañar a mis perros es todo un circo, pero, este espectáculo no termina con el baño, y después de este entran en un loco frenesí de energía, como si se hubieran vuelto locos después de bañarse y corren a gran velocidad por la casa, se paran de repente, dan vueltas, saltan a la cama, el sillón, su cobija, en fin, lo que tengan cerca para frotarse con gran energía, pero, ¿por qué lo hacen?, ¿por qué se vuelven locos?
Hay muchos especialistas en comportamiento canino que han intentado responder esta pregunta y casi todos concuerdan que esta energía explosiva que surge después del baño es una señal de alivio y calma al estrés que vivieron durante el baño.
La forma en la que el perro canaliza y manifiesta este alivio por estar fuera de esta situación tan estresante, es manifestando esa energía, sacudiéndose, corriendo y lo de frotarse es algo que hacen para secarse y más importante quitarse la sensación que les dejo el agua y casi lo hacen porque el aroma del shampoo les molesta y lo que quieren hacer es regresar a su viejo aroma natural, por eso se restriegan en sus trapos viejos y olorosos.
Aunque también hay quien dice que los perros hacen esto únicamente por diversión
Pero si quieres que la experiencia de baño sea más tranquila, has que tu perro disfrute de la rutina del baño, haciéndolo sentir cómodo, sin estresarlo y que él entienda que es un momento seguro.